Cómo cuidar tu cuero cabelludo

A pesar de que esta piel está protegida por el pelo, el cuero cabelludo suele ser una zona bastante sensible y muy frecuente de irritaciones. Es una zona bastante olvidada y no le prestamos atención hasta que sentimos algún tipo de molestia como picor o caspa.

La limpieza es un paso muy importante, el cuero cabelludo también se ve afectado por las agresiones externas como la contaminación y por sus propias segregaciones como puede ser la grasa.

Si no mantenemos el cuero cabelludo limpio lo que conseguimos es que los poros se taponen y el cabello no pueda respirar con la consecuencia de que éste se debilite o lo que es peor aún, se caiga.

Al igual que hacemos con el resto de nuestra piel debemos utilizar unos productos adecuados a nuestras necesidades y descartar los champús que nos resequen la piel.

A la hora de secarse el pelo es mucho mejor hacerlo de forma natural, aunque en el caso de que no quede más remedio nunca acercaremos el secador demasiado a la cabeza y mejor a temperatura templada. También templada debe de ser el agua de la ducha ya que el agua demasiado caliente puede producir desde irritaciones hasta leves quemaduras.